Google

Buscá Todo lo que querés desde PRIMICIASTV

Búsqueda personalizada

jueves, 4 de septiembre de 2008

"CON JORGE BRUNELLI TENÍA UNA ACTITUD PATERNAL, YO BUSCO LA CONTENCIÓN"

ENTREVISTA A CAMILA VELASCO
Tiene apenas 20 años, un rostro angelical y una historia de vida muy díficil de asimilar. Hija de Sergio Velasco Ferrero y de María Eugenia Zorzenón, Camila Velasco carga con las secuelas que la guerra que sus padres se declararon públicamente le han dejado en el alma.

Con tanto trabajo, ¿podés cumplir con la facultad?
-Estoy complicada pero con ganas, todo se puede. Y me va bastante bien.

-Después de haber aparecido desnuda en la tapa de una revista, ¿todavía te animás a andar en colectivo?
¡Sí, obvio! Aparte, no me da el presupuesto para ir en otra cosa: auto no tengo y si viajo en taxi no me alcanza la plata.

-¿No te pagaron bien por posar como Dios te trajo al mundo?
-Sí, pero con esa plata me hice las lolas.

-¿Te desnudaste sólo para ponerte siliconas?
-Claro. Ellos me pagaron por adelantado para que yo pudiera operarme y después, me dieron tiempo hasta que estuviera bien para hacer la producción. Y las lolas me salieron bastante, así que con lo que me quedó no me alcanza ni loca para comprarme un auto.

-¿Y cómo te sentiste en el momento de hacer las fotos?
-Re bien. A mí me habían contratado para ser playmate pero, como al director le gustaron tanto las fotos, terminaron haciendo una tapa conmigo. Y me encantó.

-Tu papá se enojó mucho por esa producción y dio a entender que tu mamá te empujó a hacerla, ¿fue así?
-No, nada que ver. Cuando me propusieron hacer las fotos, lo primero que me preguntó mi mamá fue si me iba a tener que sacar la parte de abajo. Yo le expliqué que sí, así que no quería que la hiciera. Tardé un montón hasta que, más o menos, la convencí de que tenía que hacerlas. Pero te juro que, hasta el día anterior a la producción seguía pidiéndome que dijera que no. “Pensá en tu abuela y en tu tía”, me decía. Hasta que debí ponerme fi rme y decirle: “Ya está, la voy a hacer y punto”. Imaginate que yo ya tenía un contrato firmado.

-Cualquiera hubiera dicho que era María Eugenia la que te llevaba por ese camino.
-No, al contrario: si yo soy tan exigente con la facultad, es porque mi mamá todo el tiempo me enseñó que tenía que estudiar. De hecho, aunque haya tenido un día larguísimo de trabajo y me muera por quedarme en la cama, me levanto como sea, tomo un café y me voy a cursar. Porque, cuando era chica, el colegio era sagrado y no podía faltar un solo día así estuviera con 40º de fiebre. Ojo que no era que no tenía vida: también iba a bailar como todas mis amigas. Pero mi mamá me decía: “Si te enfermás por salir te jodés, pero a estudiar vas igual”. Y así fue como me inculcó las ganas de aprender. Pero es cierto lo que decís, que todo el mundo piensa que es mi madre la que quiere que yo sea artista.

-Todos piensan eso porque es lo que dice tu papá, ¿no te parece?
-Puede ser, pero mi papá dice cualquier cosa. El no estuvo nunca al lado mío, así que no puede decir que no tengo valores, como dijo hace poco. Creo que, justamente, los tengo porque me los enseñó mi mamá. Si no fuera así, no estaría estudiando una carrera tan difícil como ingeniería. ¿Entendés? A esta altura de mi vida, nadie me obliga a nada. Ya está.

-¿Te dolió que tu papá dijera que no tenés valores?
-Está todo bien. Yo lo quiero ver. Pero me parece que lo hace porque ya no sabe qué decir. Fijate que a mi mamá, por la calle, todo el tiempo le dicen cosas lindas de mí. Y yo me imagino que a mi papá le debe pasar lo mismo y que eso le debe dar bronca. Si no, ¿cómo va a decir que no tengo valores?

-¿Entonces? ¿Por qué querés ver a tu papá si para vos es un desconocido?
-¡Qué sé yo! También trato de entenderlo a él. Esto fue una acumulación de cosas que fueron pasando. Yo, ahora que soy más grande, entiendo que las parejas a veces terminan mal. Y que, cuando hay un hijo de por medio, es difícil manejar la situación. Mi mamá, como mujer, siempre se preocupó por defender mis derechos. Y por ahí se pasó de la raya, pero hizo lo que pudo.

-¿No te sentís un botín de guerra en medio de esta pelea?
-Claro. Por ahí mi mamá dijo algunas cosas de más que a mi papá le molestaron. Entonces él se fastidió y nos hizo la guerra. Fue una historia muy enroscada, que terminó con este distanciamiento.

-Pero vos sos la víctima, ¿por qué tu papá no intenta acercarse a vos?
-Es difícil, porque él siente como si mi mamá y yo fuéramos una misma persona. Y es cierto que somos muy unidas, porque la verdad es que estuvimos siempre solas. De hecho, ella nunca volvió a convivir con una pareja. Pero también chocamos bastante.

-¿En serio?
Sí, por supuesto. Nunca me enfrenté por el tema de mi papá, pero sí por otras cuestiones. No somos iguales y discutimos como todo el mundo. Yo no acato todo lo que ella dice y ella, muchas veces, termina aceptando mis consejos.

-Sin embargo, vos pensás que tu papá te ve como una prolongación de María Eugenia.
-Exacto. Como no me conoce, no sabe que yo tengo una manera de pensar muy diferente a la de mi mamá. Y por eso me critica.

-¿Es cierto que lloraste cuando él te mandó un saludo por televisión?
-Sí. Yo estaba muy sensible y eso me conmovió. Llegué de la facultad y mis amigos me avisaron que estaba en Yo amo a la TV. Entonces lo puse para verlo y sentí como que él se aflojó al hablar de mí. Y después me mandó un saludo y a mí se me cayó una lágrima. Mi mamá se puso como loca, porque nunca me había visto llorando. Y hasta me dijo que, si tenía ganas, lo llamara.

-¿Lo llamaste?
-Todavía no, me cuesta un poco. Pero esta o la otra semana lo voy a llamar. Igual, no sé cómo me puede llegar a contestar. El sabe que yo quiero verlo y que estoy esperando su llamado.

-¿Te gustaría encontrarte con tus hermanos también?
-Me gustaría, pero va a ser difícil. Iván tiene mucho rencor contra mi mamá y, las pocas veces que lo vi en la tele tenía una actitud muy negativa para conmigo. De Natalia no tengo noticias, ni siquiera sé dónde vive. Es todo muy extraño.

-Me imagino que soñás con revertir esta historia con tu propia familia, ¿no?
-Es que, en realidad, sería imposible que volviera a pasar algo como lo que me pasó a mí. Obviamente, me encantaría formar una familia normal. Pero, si yo me llegara a quedar sola con un hijo, de ninguna manera repetiría esta historia.

¿Estás en pareja?
Estoy sola y demasiado atareada como para estar de novia. Si a la última persona con la que estuve saliendo la veía cada dos o tres semanas. Jorge Brunelli es mucho más grande

-¿No será que en realidad estás buscando un papá?
-Puede ser. Lo de Jorge tenía más que ver con la contención, porque empecé a salir con él justo cuando comencé a trabajar y él tuvo siempre una actitud muy paternal conmigo. Y mi primera pareja, el empresario, también era más grande que yo. Pero en el medio tuve un novio de mi edad, con el que me divertía mucho. Y la verdad es que eso estaba bueno. Y por el momento, no tengo apuro por estar con nadie.
Revista Pronto

No hay comentarios:

Analytics

ACLARACIÓN

Todo lo publicado en este blog contiene cosas de ficcion, cualquier similitud con personajes, lugares, gente, nombre, videos, fotos, marcas o cualquier cosa que tenga que ver con la realidad es pura y mera coincidencia.
El material disponible a sido sacado exclusivamente de sitiospúblicos de Internet. Por lo que este material es considerado de libre distribución.
En ningún articulo legal se menciona la prohibición de material libre por lo que Cualquier blog no infringe en ningún caso la ley.
Los Comentarios son responsabilidad de cada uno de los visitantes que los hace, de forma libre y bajo su responsabilidad.